San Agustín, la Omnipotencia de la gracia

Posted by: Juan Sobiesky

San Agustín 03 (00)
El Triunfo de San Agustín

Porque es sobrenatural, porque Dios -dueño soberano de sus designios y de sus dones- la ha colocado muy por encima de las exigencias y de los derechos de toda naturaleza creada, la santidad a la que somos llamados es inaccesible sin la ayuda de la gracia divina. Harto claramente nos lo ha dicho nuestro Señor: «Sin mí nada podéis hacer». Y observa San Agustín que no ha dicho Jesús: «Sin mí no podéis hacer grandes cosas», sino: «Sin mí nada de cuanto os conduzca a la vida eterna podéis hacer.»

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Santa Mónica, modelo de madre cristiana

Posted by: Ioseph

San Agustín 02 (10)
Santa Mónica y San Agustín

La Iglesia celebra en este día la memoria de Santa Mónica, madre de San Agustín, la cual, con sus lágrimas y oraciones, alcanzó para su hijo la gracia de la conversión. Transcribimos a continuación un fragmento del libro abajo citado, en el que queda de manifiesto el amor y el celo de esta mujer ejemplar en pro del bien espiritual de su hijo.

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La Parusía y el anciano Simeón

Posted by: Lotario de Segni

Jesus 08 (09)

Entre las causas de anemia y atonía del catolicismo actual, es preciso contar y advertir un descuido, ¡entre tantos descuidos!... llamémoslos delicadamente así…, el descuido de una verdad que, aunque desatendida, nos vemos sin embargo obligados a proclamar con voz firme, cada vez que rezamos el Credo, el Símbolo Apostólico: “Desde allí ha de venir a juzgar a los vivos y a los muertos”, y el Símbolo Nicenoconstantinopolitano añade: “Con gloria”.

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Cómo prepararnos para la Sagrada Comunión (IV)

Posted by: Nycticorax

Jesus 07 (08)

Continuamos con la exposición del primer requisito para recibir bien la Comunión -pureza de conciencia- y de los dos pecados que máximamente se oponen a ella: el odio y la deshonestidad.

a) Libres de odio: Porque, cuanto a lo primero, este sacramento es sacramento de amor y de unión, porque en él participan los fieles un mismo alimento y un mismo espíritu, el cual hace a todos los fieles una misma cosa por amor.

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La Vista

Posted by: Lotario de Segni

David 02 (02)
El Rey David mirando a Betsabé

La vista, que es, sin duda, el regalo más bello y precioso que el Creador nos ha hecho, en el orden de los sentidos, constituye al mismo tiempo un peligro permanente para el hombre.

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Director espiritual

Posted by: Ioseph

Director Espiritual 01 (01)

Hay que saber que el hombre que tenga un instructor por cuyo consejo se rija y cuya obediencia siga en todos sus actos, pequeños y grandes, podrá llegar más fácilmente y en tiempo más breve a la perfección, que si quiere perfeccionarse a sí mismo, aunque tenga un entendimiento muy agudo y tenga libros en los que se trata de la estructura de todas las virtudes.

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Una nube lo ocultó de su vista

Posted by: Laudem Gloriae

Jesus - Ascension 01 (05c)

Junto a la esperanza y a la gozosa expectativa del cielo, la fiesta de la Ascensión tiene también un tono de melancolía. Frente a la definitiva partida de Jesús, los Apóstoles debieron sentirse presos de una sensación de espanto, ese espanto de quien ve alejarse para siempre al amigo y sostén más querido y se encuentra solo ante las dificultades de la vida.

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Cómo prepararnos para la Sagrada Comunión (III)

Posted by: Nycticorax

Comunión de los Apóstoles 02 (02)

En los sucesivos artículos de esta serie trataremos acerca de los requisitos necesarios para la digna recepción de este Sacramento.

Primero: Pureza de conciencia. Pues, para que esto (la Sagrada Comunión) se haga como conviene, la primera cosa que se requiere es limpieza de conciencia, esto es, que vayamos limpios de todo pecado mortal.

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La práctica de la humildad (XI)

Posted by: Ioseph

San Francisco de Asís 08 (44)
San Francisco de Asís apedreado por niños

Para crecer más en esta virtud y para endulzar y familiarizarte con las humillaciones te sería muy provechoso que te representaras a menudo en la imaginación las afrentas que te pueden sobrevenir y te esforzaras en aceptarlas, aun a costa de la naturaleza recalcitrante, como prenda segura del amor que Dios te tiene y como medio seguro de santificación. Quizá para ello tendrás que sostener muchos combates; pero sé valiente y esforzado en la pelea hasta que te sientas firme y decidido a sufrirlo todo con alegría por amor de Jesucristo.

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Caridad y justicia

Posted by: Lotario de Segni

Fábrica 01 (01)

Deseamos decir una palabra sobre la cuestión social, que se debe regular según las normas de la justicia y de la caridad.
Mientras las doctrinas comunistas, que se difunden hoy por todas partes, engañan fácilmente la simplicidad e ignorancia del pueblo, parecen resonar en nuestros oídos las palabras de Jesucristo:
«Tengo compasión de esta muchedumbre» (Mc 8,2). Es absolutamente necesario que se lleven cuidadosa y diligentemente a la práctica los rectos principios que sobre este punto enseña la Iglesia.

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Debemos abocarnos al servicio divino

Posted by: Nycticorax

Dios Padre 02 (04)

No sólo estamos obligados a la virtud y obediencia de los mandamientos divinos por lo que Dios es en sí, sino también por lo que es para nosotros: que es por razón de sus innumerables beneficios, de los cuales trataremos aquí para que, por ellos, veamos las grandes obligaciones que tenemos al servicio del Dador.

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El valor de nuestra alma

Posted by: Ioseph

San Francisco de Borja 01 (01)
San Francisco de Borja - Muerte de Santa Isabel de Portugal

La primera obligación que el hombre tiene es la de conocer a su Hacedor y reconocerle por su Señor, y convertir en su servicio el don de la vida que de él recibió. De manera que, lo que por su Bondad comenzó a ser, para Él se prosiga y en Él termine; y la merced que recibió sin merecerla, sirviéndole con ella, luego la merezca.

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La práctica de la humildad (X)

Posted by: Ioseph

Santo Domingo de Guzmán 01 (07b)
Santo Domingo de Guzmán

Considera también los ejemplos que nos han dejado los santos de la antigua y nueva Alianza.
Isaías, aquel profeta tan virtuoso y observante, se creía impuro delante de Dios, y confesaba que toda su justicia, es decir, sus buenas obras, eran como un paño lleno de suciedad. Daniel, a quien el mismo Dios llamó santo, capaz de detener con su oración la cólera divina, hablaba a Dios como un pecador que está lleno de vergüenza y confusión.

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Cómo prepararnos para la Sagrada Comunión (II)

Posted by: Nycticorax

Hostia 01 (02)

La primera cosa que para comulgar dignamente se requiere es reconocer el hombre con grande humildad que ninguna diligencia de hombre ni de ángeles es bastante para esta preparación, si no interviene la mano de Dios, que para ello especialmente nos ayuda.

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La práctica de la humildad (IX)

Posted by: Ioseph

Agonís en el Huerto 05 (04)
Agonía en el Huerto

Un enfermo que desea vivamente la curación procura evitar todo lo que pueda retrasarla; toma con temor aun los alimentos más inofensivos y casi a cada bocado se detiene a pensar si le sentarán bien; también tú, si deseas de corazón curarte de la funesta enfermedad de la soberbia, si verdaderamente anhelas adquirir esta preciosa virtud, has de estar siempre en guardia para no decir o hacer lo que pueda impedírtelo; por esto, es bueno que pienses siempre si lo que vas a hacer te lleva o no a la humildad, para hacerlo inmediatamente o para rechazarlo con todas tus fuerzas.

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La práctica de la humildad (VIII)

Posted by: Ioseph

San Pío de Pietrelcina 02 (07)
San Pío de Pietrelcina

Si en la Comunión tu corazón está inflamado de amor divino, tu espíritu debe estar penetrado de sentimientos de verdadera humildad. ¿Cómo no asombrarte al considerar que un Dios infinitamente puro e infinitamente santo llegue a esos extremos de amor por una miserable criatura como tú, y se te dé a Sí mismo en alimento?
Abísmate en las profundidades de tu indignidad; acércate a la adorable santidad de Dios con suma reverencia, y cuando a este amable Señor, que es todo caridad, le plazca acariciarte, haciéndote partícipe de sus inefables dulzuras, no disminuyas en nada el respeto debido a su infinita Majestad, no salgas nunca del lugar que te corresponde, y que es la sumisión, la abyección y la nada; pero que el sentimiento de tu pobreza y de tu miseria no te lleve a cerrar tu corazón y a menguar en nada esa santa confianza que debes tener en tan celestial banquete; antes, por el contrario, debe hacerte crecer en amor a tu Dios que se humilla hasta convertirse en alimento de tu alma.

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