Los siete vicios capitales y sus remedios. II La avaricia.

Posted by: Lotario de Segni

El Becerro de oro 01 (01)

(II) La Avaricia

La avaricia es el desordenado apetito de los bienes de fortuna. Dios nos ha concedido estos bienes para nuestra vida corporal y para hacernos llevadera nuestra peregrinación sobre la tierra. No son malos en sí mismos, pero fácilmente resultan para nosotros un lazo peligroso.
La avaricia es, por lo común, un vicio de los viejos, sin que esto quiera decir que no se halle en otros, especialmente según su grado inferior que consiste en el deseo de poseer lo indispensable para vivir con cierta holgura. No es grave en sí mismo ese vicio, pero con facilidad resulta tal en sus consecuencias, puesto que tiende a violar la caridad y la justicia y hace al alma insensible a los bienes eternos.

Remedios:
1) Considérense los daños que la avaricia acarrea. Ningún medio –mentira, fraude, traición, violencia– arredra al que posee este vicio. Se muestra egoísta y duro con los desgraciados y pierde la noción de honradez.
2) Pensar que la fortuna es incierta e inestable; que puede perderse en cualquier momento y que llegará un día en que será forzoso dejarlo todo.
3) Ya que los bienes de este mundo constituyen un serio obstáculo para la vida verdadera, se ha de promover la limosna en todas sus formas.
4) Recuérdese la enseñanza y el ejemplo de Nuestro Señor Jesucristo que “
siendo rico se hizo pobre” (I Cor 8, 9), que es una condenación para el cristiano que no mantiene su corazón sustraído al poderoso influjo de las riquezas mediante una vida sobria, sencilla y abnegada.

Fuente: R.P. Víctor Lithard C.S.Sp., Curso de teología pastoral, Editorial Litúrgica Española, 1933